martes, 3 de octubre de 2017

SECCIONES QUINCENALES (Magazine No.583)

CONTENIDO:
  • Recomendaciones del Magazine (Cine y TV)
  • Blog de la Semana (Katherine Chacón)
  • 365 Meditaciones Tao (Ming Dao Deng)
  • Meditación: El arte de recordar quién eres (Osho)
  • Cuento

RECOMENDACIONES DEL MAGAZINE:

CINE Y TV:
  • El destino del guerrero (Jang Dong-gun y Geoffrey Rush / Dir. Sngmoo Lee / TV Filme / ISAT)
  • Zatoichi (Takeshi Kitano y Tadabonu Asano / Dir.: Takeshi Kitano / TV Filme / Edge)
  • La bruja de cabello blanco del reino lunar (Fan Bingbing y Huang Xiaoming / Dir.: Jacob Cheung / TV Filme / ISAT)
BLOG DE LA SEMANA (Por Katherine Chacón): https://www.quicoto.com/ Un Blog de fotografía muy interesante.

Walter de María (EEUU / 1935-2013): The Lightning Field (1977)

365 MEDITACIONES TAO (Ming Dao Deng)

XXVI

Adoración
Imágenes en el altar,
O imaginadas en nuestro interior:
Nosotros les rezamos,
¿Pero ellas responden?

Los sabios nos dicen lo importante que es la adoración. Así que nos arrodillamos ante los altares, damos ofrendas y hacemos sacrificios. En nuestras meditaciones, se nos enseña a ver dioses dentro de nosotros mismos y a suplicar para recibir poder y conocimiento. Hacemos esto con gran sinceridad, hasta que los maestros nos dicen que no hay dioses. Entonces quedamos confundidos.

La estatua en el altar es mera madera y oro laminado, pero nuestra necesidad de reverencia es real. El dios en nuestro interior puede que no sea más que una visualización, pero nuestra necesidad de concentración es real. Los atributos del cielo son conjeturas utópicas, pero la esencia de esas parábolas es real. Los dioses, entonces, representan ciertas filosofías y facetas extraordinarias de la mente humana. Cuando nos dedicamos a los dioses, establecemos comunión con estos aspectos más profundos.

El pensar que estamos rindiendo culto a algo simbólico puede hacernos sentir incómodos. Somos educados para aceptar sólo lo tangible, lo científico, lo material. Dudamos de la eficacia de adorar lo meramente simbólico, y nos confunde cuando tal reverencia trae consigo una genuina transformación personal. Pero el rendir culto sí afecta nuestros sentimientos y pensamientos. Cuando los sabios dicen que no hay dioses, quieren decir que la clave para entender todas las cosas está dentro de nosotros mismos. El culto externo es meramente un medio para señalar al interior, hacia la verdadera fuente de salvación.

MEDITACIÓN: EL ARTE DE RECORDAR QUIÉN ERES (Osho)


“El no-hacer no tiene nada que ver con la pereza De hecho, una persona perezosa nunca puede entrar en el no-hacer.

Un apersona perezosa está cerrada; su energía no fluye.

Un no-hacedor es una persona que fluye, viva.

Hace muchas cosas, muchas más que los hacedores ordinarios, pero, aun así, sigue siendo un no-hacedor.

Todo lo que hace no es más que un suceso.

Nunca piensa: ‘Lo estoy haciendo yo’.

A lo sumo piensa: ‘¿Lo estoy permitiendo yo?’

Un no-hacedor no se cansará porque no tendrá tensión. Un no-hacedor hará muchas cosas y no acumulará nada de ego porque él no es quien hace.

Las cosas simplemente suceden.”


CUENTO

EL CHACAL Y EL COCODRILO


Érase una vez un pequeño y astuto chacal que muy hambriento rondaba por la orilla del gran río en busca de algún pececillo o cangrejito con que alimentarse.

Pero en el fondo del río vivía un enorme cocodrilo, que también estaba hambriento y que, escondido entre el barro y las cañas, espiaba al chacal en espera de que en cualquier momento diese un paso en falso y cayera al agua para comérselo.

En varias ocasiones a punto estuvo el chacal de meterse precisamente en la boca del cocodrilo, pero valiéndose de su astucia logró salvarse del mortal peligro.

Entonces, temeroso de ser engullido por el feroz cocodrilo, el chacal decidió irse a pescar a otro lugar del río, donde no estuviera bajo la constante amenaza del saurio. Pero éste, muerto de hambre y loco de rabia al ver que se le escapaba tan rico bocado, determinó salir del río e ir en busca de la guarida del chacal para vengarse de él. Y ésa fue su perdición, porque enterado el astuto chacal de que el cocodrilo aguardaba en el interior de su madriguera para comérselo, encendió una enorme hoguera a la entrada hasta que el enemigo, impotente para franquear la barrera de llamas, quedó reducido a un montón de cenizas.

El elemento propio da fuerza y confianza; salirse de él es un riesgo imprudente.

Panchatantra


No hay comentarios.:

Publicar un comentario