LO
ESOTÉRICO DE LAS PLANTAS: EL PODER DE LOS ÁRBOLES
“La fuerza del espíritu del árbol puede curar al
enfermo, especialmente si es un árbol de Júpiter, porque el nos ha dado la
fuerza curativa. En los pueblos pequeños, incluidos los de la provincia
holandesa de Brabante, aun podemos encontrar un ‘árbol de la fiebre’, un roble
de cuyas ramas cuelgan numerosos cordeles: pertenecen a trozos pertenecientes a
camisas o ropa de cama de un enfermo.
La fuerza curativa del árbol pasa a los cordeles y
de ahí, por la vinculación etérea, al enfermo mismo. Se llama a esto magia
simpática. Los objetos cercanos a las personas llevan sus vibraciones y
permanecen vinculados a ella por muy alejados que puedan estar de su cuerpo: de
este modo se puede transmitir vibraciones de fuerza en ambas direcciones.
Si hay que estimular el crecimiento de los cabellos
de esa persona se aplican a un árbol de muchas ramas y rápido crecimiento, por
ejemplo, un álamo. Se abre un poco la corteza, se meten ahí los cabellos y se
vuelve a cerrar. Para ayudar a curar un brazo enfermo se ataba al brazo un
anémone africano con un cordel de cáñamo. Tras haberlo hecho así varias horas
al día durante varios días el brazo estaba curado y la planta había enfermado.
Debemos considerar, por tanto, si un árbol es lo bastante fuerte para quitarnos
una enfermedad sin recibir él el daño”.
Mellie Uyldert
Nei Dan Magazine No. 260 (08-12-09)
Sección: "De plantas y algo más" (Yilda Conquista)
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